Especialistas del Programa de Investigación y Análisis de Residuos y Contaminantes Químicos de la FIQ estudian posibles soluciones a problemas de salud pública e impacto ambiental.
Días pasados, en la ciudad de Santiago de Chile, docentes-investigadores, estudiantes y jóvenes graduados de nuestra Facultad que desarrollan labores en el Programa Investigación y Análisis de Residuos y Contaminantes Químicos (PRINARC), tuvieron una participación destacada en el 5º Congreso Latinoamericano de residuos de plaguicidas. Este importante Congreso, que se desarrolla cada dos años, constituye un espacio para la exposición de trabajos de investigación y desarrollo tecnológico y el debate acerca de los residuos de plaguicidas en los alimentos y el medio ambiente.
En esta quinta edición, la Facultad de Ingeniería Química a través del equipo del PRINARC se hizo acreedora de dos de los tres premios que se otorgaban a los mejores de 141 trabajos presentados sobre diferentes temáticas. Los mismos fueron evaluados por un comité conformado por miembros de grupos de científicos destacados a nivel mundial en el área de química analítica de plaguicidas y de química y toxicología ambiental.
Respecto a estas distinciones en particular y al trabajo de todo el equipo de docentes-investigadores en general, el Ing. Horacio Beldoménico, director del PRINARC, manifestó: “Estar haciendo ciertos trabajos, poder hablar de ellos y tomar decisiones acerca de acciones correctivas o de situaciones que puedan orientar a mejorar la situación existente y a interpretar lo que pasa, son aportes invalorables de la FIQ. Nuestro grupo se ha involucrado en casi todos los temas más comprometidos que existen (arsénico, selenio, glifosato y otros plaguicidas en alimentos, agua y ambiente), aportando estudios y soluciones cada vez con más calidad”. Finalmente, remarcó: “Nadie nunca nos ha impuesto qué trabajos hacer, siempre hemos tenido la independencia de las Universidades Públicas y con el criterio más científico imperando todas nuestras opiniones. Eso vale oro”.
Método para determinar insecticida en flores de girasol
Uno de los trabajos destacados fue “UHPLC/MS-MS analysis of imidacloprid in sunflower crops”, realizado por Melina Michlig, Julieta Merke, Karina Romero, Natalia Bulaccio, César Salto, Horacio Beldoménico y María Rosa Repetti, el cual recibió el premio del European Pesticide Residue Workshop. El mismo consistió en un monto de 1500 euros, lo cual estimula y facilita la participación en el próximo evento que se realizará en el 2016 en Chipre.
El poster premiado tuvo de sustento la investigación realizada por la recientemente graduada, Lic. Melina Michlig, y consiste en el desarrollo de un método para determinar imidacloprid en polen y néctar de flores de girasol y su aplicación sobre muestras experimentales de mucho interés agronómico.
El imidacloprid es el insecticida más utilizado en la actualidad, pertenece a la familia de los denominados neonicotinoides, su modo de acción implica la alteración del sistema nervioso central de los insectos. “Debido a que actualmente la población de abejas está disminuyendo notablemente, nos propusimos evaluar si se encuentran residuos de imidacloprid en el polen y el néctar de girasol (ambos productos son consumidos por abejas), de plantas cuyas semillas fueron tratadas con este insecticida”, explicó Michlig y añadió: “Cabe aclarar que existen regulaciones muy recientes en la Unión Europea restringiendo su uso, debido a sus potenciales efectos sobre insectos polinizadores”.
La Licenciada en química remarcó la ayuda de sus compañeros del PRINARC, el funcionamiento en equipo y en forma interdisciplinar. “Las investigaciones se están desarrollando en conjunto con otra institución, el INTA EEA Rafaela. Los resultados obtenidos en los estudios previos, nos orientaron a proseguir las investigaciones sobre el tema, diseñando ensayos de exposición empleando un set experimental de colmenas. Sabemos que esto es importante pues un mejor conocimiento de estos temas contribuye mucho a prevenir los efectos del uso de plaguicidas sobre el ambiente, especialmente en este caso sobre los insectos polinizadores que juegan un rol vital en la producción de una gran variedad de cultivos alimenticios en la actualidad”.
Método simplificado para la cuantificación de glifosato
Por su parte, la American Chemical Society otorgó el premio “Mejor Trabajo” al realizado por Luisina Demonte, Nicolás Michlig, Silvia García, Juan José de Jesús, Horacio Beldoménico y María Rosa Repetti, titulado “Development and validation of a simplified method for the determination of glyphosate, AMPA and glufosinate in water”.
De acuerdo a la explicación de Luisina Demonte, investigadora del PRINARC y becaria CONICET para el doctorado en Química, “debido a que el glifosato y herbicidas relacionados son utilizados prolongadamente en Argentina, en el trabajo se presenta un método simplificado para la cuantificación de glifosato, su principal metabolito ácido aminometilfosfónico (AMPA) y glufosinato a nivel de trazas en muestras ambientales”. El método se aplicó para analizar muestras de aguas superficiales y subterráneas, de varias regiones de Argentina. Es un paso muy importante, sostuvo Demonte, “pues el glifosato es el herbicida más utilizado en el mundo pero a su vez el menos monitoreado. Esto es en parte por las dificultades analíticas y el costo que presenta su análisis. Podremos, seguramente ampliar considerablemente nuestros conocimientos sobre la distribución en el ambiente que la alta carga de agroquímicos produce y lo estamos haciendo en forma interdisciplinar de la mano de otros investigadores de otras instituciones asociadas como de la propia UNL y del INTA”.
En cuanto al premio recibido, la Licenciada en Química, manifestó: “Este reconocimiento nos incentiva a seguir con nuestro trabajo, a fin de optimizar metodologías que permitan una mejor determinación de este tipo de compuestos cuyo impacto en Argentina y el mundo es de gran relevancia”. La continuidad y el impacto de la investigación que viene llevando a cabo este grupo del PRINARC se prevé en dirección a que “las aplicaciones de estas metodologías noveles al análisis de alimentos, aguas, suelos, biota, que también están contempladas en nuestros trabajos contribuirán a aportar soluciones a los problemas de salud pública, impacto ambiental e influencia en la economía regional”.
Es importante señalar que ambos trabajos premiados contaron con el invalorable aporte de María Rosa Repetti, profesora e investigadora del área que ha sido gestora y conductora de las investigaciones.
Pioneros en la temática
El Programa de investigación y análisis de residuos y contaminantes químicos fue creado a fines del 2011 en la FIQ, a partir de las dependencias y personal del Laboratorio Central de Servicios Analíticos (LCSA), ubicadas en el sexto piso del Edificio Damianovich. De este modo, se conformó una estructura de mayor capacidad y alcance, sobre todo en los campos de la investigación científica y la docencia.
El actual director del PRINARC, Ing. Horacio Beldoménico, sostuvo que adoptaron la especialidad de residuos y contaminantes, y que estudian “cómo detectar y cuantificar confiablemente aquellas sustancias, que se encuentran en muy bajos niveles de concentración en los alimentos más variados y muestras ambientales, lo que aún constituye un verdadero desafío para la Química Analítica contemporánea. Disciplina que ha aportado a esta temática sustanciales avances en los últimos años, por ejemplo en las áreas de la cromatografía-espectrometría de masa y de las espectrometrías atómicas. Aplicamos estas metodologías avanzadas para estudiar distintos temas de mucho interés regional”.
Asimismo, el Director recalcó el carácter interdisciplinario de los trabajos los que se realizan en conjunto con importantes instituciones locales y nacionales, y a través de convenios de cooperación internacional con centros de excelencia internacionales.
Finalmente, Beldoménico sostuvo: “tenemos la buena noticia de que se encuentra muy avanzada la ejecución de un proyecto FINSET, recientemente adjudicado a la FIQ por medio del cual se posibilita la incorporación de importante equipamiento al PRINARC, lo que significa contar con una plataforma de gran capacidad analítica de características únicas en la región, con las que se perfeccionarán los estudios sobre esa temática y que jugará seguramente un importante rol para el desarrollo de la calidad y la inocuidad de los agroalimentos producidos en nuestra región”.