La representación mental que tiene un gran porcentaje de la población cuando piensa en Física es, quizás, un laboratorio lleno de modelos de artefactos, de piezas conectadas, de cientos de fórmulas volcadas en una pizarra o cuaderno, y de un Físico aislado en esa habitación con guardapolvo, hiperactivo y versátil. En la actualidad, las tecnologías de la información y las comunicaciones (TICs) han permitido dar un salto cualitativo en la enseñanza de la Física: traspasar las barreras de los laboratorios y llegar a través de la red de redes a cualquier rincón del planeta con conectividad.

Desde hace muchos años, el Departamento de Física de la Facultad de Ingeniería Química de la UNL viene trabajando en el desarrollo de laboratorios remotos como parte de los Proyectos de Educación en Física para ser utilizados en la enseñanza. “Nosotros venimos trabajando desde el año 1996, comenzamos desarrollando equipos de adquisición de datos para trabajos prácticos y para informatizar análisis de laboratorios de la Facultad. Esto fue evolucionando hasta llegar a controlar de manera de remota los experimentos de física”, sostuvo Pablo Lucero docente técnico y coordinador del área electrónica e informática del proyecto.

La idea surgió a partir de consultas realizadas por otras universidades. El docente se remontó a los orígenes y sostuvo: “Nosotros teníamos equipos informatizados para trabajos prácticos de física y nos preguntaron cómo podían acceder ellos, entonces se nos ocurrió que si se podían comandar por internet sería accesible para todos. Como estaba en auge el comando a distancia, nos pusimos a investigar con mucha ayuda de alumnos, en especial en el software del laboratorio remoto. Así iniciamos con el de electricidad y luego se incorporaron el de magnetismo y electricidad”.

Física a distancia

El Proyecto de Laboratorios Remotos nació a principios de 2005. El primer experimento remoto quedó terminado a finales de 2006 y se incorporó oficialmente al uso abierto al uso por parte de otras universidades en 2007. Es un Proyecto de la Secretaría de Políticas Universitarias (SPU) coordinado por la Universidad Nacional de Rosario, del cual participan la Facultad de Ingeniería Química de la UNL y la Universidad Estatal a distancia de Costa Rica. El proyecto consiste básicamente en un intercambio de conocimientos y experiencias, en donde se comparten recursos.  El profesor Hugo Kofman explicó que “son experimentos en Física reales, no se trata de simulaciones sino de sistemas físicos concretos que el alumno en lugar de manipularlos en forma presencial lo puede hacer a distancia a través de internet, observando a través de una cámara qué es lo que sucede”. Es similar, comparó el docente, “a un sistema robotizado que el alumno maneja desde cualquier otra Universidad o desde cualquier otro país que se contacte. Es un dispositivo que se está desarrollando en los últimos años y se está aplicando en la educación a distancia o como complemento de la educación presencial, permitiendo compartir experimentos con otras universidades”.

Colaborar y compartir

En el marco de este proyecto, docentes de la Universidad Estatal a distancia de Costa Rica visitaron la FIQ para aprender desde el punto de vista tecnológico, electrónico, mecánica, informática, qué tienen los experimentos y cómo pueden hacer ellos para desarrollar su propio laboratorio remoto. De este modo, explicó Kofman, “ellos lo desarrollan, nosotros colaboramos y también lo vamos a poder utilizar porque se trata de recursos compartidos. Uno de los docentes costarricenses que nos visitaron es de Física y ha trabajado con sus alumnos haciendo las experiencias en los laboratorios de acá y de allá a distancia, con lo cual ya tenemos algunos resultados en la práctica”.

El laboratorio remoto completo está compuesto por tres experimentos, tiene un servidor propio, posee cámaras para poder ver los experimentos y está abierto al uso de cualquier universidad que lo solicite. Desde el Departamento de Física se generan los usuarios de manera totalmente gratuita. Los desarrollos son propios y están financiados por la UNL.

Actualmente los experimentos que están en funcionamiento son de: mecánica (se trata de un riel que se puede inclinar a diferentes ángulos sobre el que rueda un volante para estudiar su movimiento con los momentos de inercia y su rotación), electricidad (permite analizar fenómenos transitorios de circuitos que tienen resistencia, capacitores y bobinas) y el de magnetismo (permite tomar la medición de un campo magnético de un solenoide, un electroimán, en diferentes puntos del mismo para analizar cómo se distribuye el capo magnético). El cuarto experimento que se encuentra en desarrollo, es de óptica y permite obtener espectros de difracción de redes con el láser.

Experiencias “físicas”

Desde el inicio del proyecto, la participación de los estudiantes fue crucial. Marcelo De Greef, Ingeniero Industrial y estudiante de Doctorado, y desarrollador de uno de los dispositivos del laboratorio, sostuvo: “Las TICs nos brindan una herramienta para poder aplicarla en la enseñanza de la física. Los Laboratorios Remotos son un ejemplo claro de eso. Esto no es algo que reemplaza la experiencia en el laboratorio sino que la complementa, permitiendo acceder a experimentos que se encuentra en otra parte del mundo”.

Otro de los estudiantes, quien realizó su Cientibeca en el Departamento de Física realizando la programación de los servidores y de los clientes para las experiencias remotas, fue Juan Pesoa quien dijo: “Esta experiencia permite que aumente la eficiencia de uso de un equipo de experimentación para la enseñanza porque pocos equipos pueden ser utilizados por mucha gente alrededor del mundo. Se da una retroalimentación entre varias universidades participantes que permite que se enriquezca la formación de las personas”.

Por parte de la Universidad Estatal a Distancia de Costa Rica, los docentes y coordinadores del Área de Física, Carlos Arguedas y Fernando Ureña, visitaron la FIQ viendo las prácticas y aprendiendo porque su mayor interés reside en que son una Universidad a distancia y quieren potenciar este tipo de formación en Física.

En este sentido, Carlos Arguedas , sostuvo: “La experiencia ha sido muy buena porque en Latinoamérica no conocemos de otros lugares en donde tengan prácticas remotas de Física y que estén tan avanzados como en FIQ, con lo cual para nosotros es muy beneficioso”.

Por su parte Fernando Ureña explicó: “estamos aprovechando la experticia de quienes han trabajado en estos proyectos para que nos ayuden a concluir nuestro proyecto, instalando un laboratorio remoto que será compartido al igual que el de FIQ. Nuestra meta es que a finales de 2015 podamos contar con nuestro primer laboratorio remoto funcionando para nuestros estudiantes y para compartir con los estudiantes de Santa Fe y Rosario”.

Prensa FIQ